Somos CB.cl reactivado. Desde el origen de este sitio web, siempre hemos sido decididos partidarios de una verdadera economía de mercado, competitiva en todos los ámbitos y contraria a todo grupo de interés que ejerza o promueva situaciones que los favorezcan en detrimento de la sociedad. Hemos señalado permanentemente a través de los años que tal modelo de verdadera economía de mercado se mal aplicó en Chile, generando una serie de abusos, grupos de interés y distorsiones, que explican que no seamos un país desarrollado (a pesar de tener todas las condiciones para ya serlo), que hayamos caído en la inestabilidad política de los últimos años y que la confusión entre el “buen modelo teórico” que se debió implementar versus el “modelo real implementado” haya llevado a cuestionar el primero en pro de recetas populistas y fracasadas.
En esta nueva etapa nos enfocaremos en destacar diversas transgresiones al Orden Público Económico de las cuales hemos sido objeto, junto con publicar temas económicos relacionados. Hacemos presente que los temas expuestos van más allá de un conflicto entre privados, ya que la esencia de cada conflicto apunta a serias falencias que impiden el correcto funcionamiento del sistema económico, político y judicial, siendo de interés ciudadano. La pérdida social de todo lo anterior es la diferencia entre, por ejemplo, Australia y nuestro país.
Es así, por ejemplo, que nuestros escritos expondrán cómo las normas legales relativas a competencia y valores mobiliarios -claves en un sistema de mercado- si bien existen, se ejercen superficialmente, lo que ha sido un grave escollo para el crecimiento.
Hemos sido perjudicados por innumerables transgresiones al Orden Público Económico, tanto por actores del sector público como privado, con la consecuente «cancelación» por no haber sido parte de un “sistema” que ha funcionado como un club pro empresario en vez de haber sido pro empresa.
Las diversas situaciones que describiremos – que son de común ocurrencia en nuestro país y sin reproche alguno-, se sancionan severamente en los países desarrollados. La buena noticia es que el avance técnico y las conexiones con los mercados desarrollados facilitan el que las leyes locales y extranjeras se apliquen en Chile con la misma rigurosidad con que se aplican en otros mercados, en los que las sanciones por transgresiones son de una drasticidad totalmente desconocida en el medio local.
Nuestra misión es perseguir la justicia nacional e internacional hasta el final, con lo expresado más arriba como criterio y sin vacilaciones.