Ojalá que la crisis de Carabineros, que llevó al Gobierno a tomar la decisión de remover a su general director y a otros 10 generales, desencadene una dinámica virtuosa donde la mentira sea cada vez más castigada por la sociedad.
Patricio del Sol G.
Señor Director:
Ojalá que la crisis de Carabineros, que llevó al Gobierno a tomar la decisión de remover a su general director y a otros 10 generales, desencadene una dinámica virtuosa donde la mentira sea cada vez más castigada por la sociedad.
La trayectoria de pérdida de confianza en Chile solo se puede revertir si logramos priorizar la verdad como valor capital, porque el problema no es la percepción de desconfianza, sino la realidad de la mentira.
Es indispensable instaurar en la sociedad y en todas sus organizaciones una cultura de transparencia, con tolerancia cero a la mentira, donde sea obligación poner todos los temas sobre la mesa, por más incómodos que sean para las autoridades.
Estamos acostumbrados a convivir con la mentira. La credibilidad de la Iglesia Católica se habría afectado muchos menos si no hubiera encubierto los abusos de algunos de sus miembros. La sociedad hace vista gorda cuando notarios, custodios de la fe pública, estampan frases mentirosas como «leyó, firmó y ratificó ante mí don(a)…», con timbre y firma del notario, cuando la verdad es que la persona leyó, firmó y ratificó ante una funcionaria, nunca vio al notario.
La verdad conduce a la confianza, que es el motor oculto del progreso económico y humano, al facilitar todas las interacciones, complejas y mundanas.
La mentira en cambio conduce a la desconfianza, la que impone una enorme carga cognitiva, como la arena en las ruedas de la sociedad, frenando las cosas, consumiendo energía y las ganas de vivir.
La verdad es un círculo virtuoso y la mentira es uno vicioso. Como Adam Smith planteaba en su «Teoría de los sentimientos morales» de 1759, «la franqueza y la apertura conducen a la confianza. Confiamos en el hombre que parece dispuesto a confiar en nosotros». «La reserva y la ocultación, por el contrario, provocan desconfianza».
Espero que este lamentable episodio de Carabineros gatille la salida de la cultura chilena del círculo vicioso de la mentira, para instalarnos en uno virtuoso donde la verdad sea cada vez más valorada.
Patricio del Sol G.
Fuente: https://www.elmercurio.com/blogs/2018/12/22/65765/Tolerancia-cero-a-la-mentira.aspx